Tratamientos para la obesidad

La cirugía gastrointestinal proporciona la pérdida de peso más sustancial y sostenible en individuos con obesidad.

Los procedimientos se denominan colectivamente bariátricos (de las palabras griegas baros [peso] e iatrikos [medicina]) o metabólico (cuando ella intención es la cirugía de reducción del riesgo cardiometabólico) y se encuentran entre los procedimientos gastrointestinales más comunes.

Aunque los procedimientos de cirugía bariatrica y metabólica se utilizan para el tratamiento de la obesidad y la diabetes, es importante hacer una distinción entre la cirugía bariátrica y la cirugía metabólica. La cirugía bariátrica se define como un procedimiento que se realiza para el control de peso, mientras que la cirugía metabólica se define como la cirugía gastrointestinal realizada con el objetivo de tratar la diabetes y el síndrome metabólico. (45)

El síndrome metabólico es un grupo de trastornos que se presentan al mismo tiempo y aumentan el riesgo de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular y diabetes tipo 2. Estos trastornos incluyen aumento de la presión arterial, niveles altos de azúcar en sangre, exceso de grasa corporal alrededor de la cintura y niveles anormales de colesterol o triglicéridos.

Tener solo uno de estos trastornos no significa que tienes síndrome metabólico. Pero sí significa que tienes un mayor riesgo de contraer una enfermedad grave. Y si desarrollas más de estos trastornos, tu riesgo de complicaciones, como la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardíacas, aumenta aún más.

Los procedimientos quirúrgicos bariátricos causan pérdida de peso al restringir la cantidad de alimentos que puede contener el estómago, causando mala absorción de nutrientes, o mediante una combinación de restricción gástrica y mala absorción.

Los procedimientos bariátricos también a menudo causan cambios hormonales. La mayoría de las cirugías para perder peso hoy en día se realizan utilizando técnicas mínimamente invasivas (cirugía laparoscópica).

La Federación Internacional para la Cirugía de la Obesidad y las enfermedades metabólicas informaron que casi 580,000 procedimientos metabólicos fueron realizados en todo el mundo en 2014. La Sociedad Estadounidense de Cirugía Metabólica y Bariátrica estimó que en los Estados Unidos se realizaron 179,000 procedimientos metabólicos en 2013 y 196,000 se realizaron en 2015. La American Heart Association también reconoce la creciente importancia de estas técnicas (1).

Tratamientos no Quirúrgicos

El objetivo del tratamiento contra la obesidad es alcanzar y mantener un peso saludable. Esto mejora la salud en general y reduce el riesgo de desarrollar complicaciones relacionadas con la obesidad.

Inicialmente lo ideal es una pérdida de peso modesta: entre el 5 % y el 10 % de tu peso total. Esto significa que si pesas 200 libras (91 kg) y tienes obesidad según los estándares del IMC, solo tendrías que bajar alrededor de 10 a 20 libras (de 4,5 kg a 9 kg) para que tu salud empiece a mejorar. Sin embargo, cuanto más peso pierdas, mayores serán los beneficios.

Todos los programas para la pérdida de peso requieren cambios en tus hábitos alimentarios y un aumento de la actividad física. Los métodos de tratamiento adecuados para ti dependen de la gravedad de tu obesidad, de tu estado general de salud y de tu voluntad de participar en el plan de pérdida de peso.

  • Reducir las calorías
  • Sentirte satisfecho comiendo menos
  • Elegir opciones más saludables
  • Restringe ciertos alimentos
  • Reemplazos alimentarios
  • Haz ejercicio
  • Mantente en movimiento
  • Cambios de conducta

La modificación del comportamiento, a veces llamada “terapia conductual”, puede abarcar:

  • Asesoramiento psicológico
  • Grupos de apoyo
  • Medicamentos con receta para adelgazar

El bloqueo del nervio vago es otro tratamiento para la obesidad. Consiste en implantar un dispositivo debajo de la piel del abdomen que envía impulsos eléctricos intermitentes al nervio vago abdominal, que indica al cerebro cuándo el estómago se siente vacío o lleno. Esta nueva tecnología fue aprobada por la FDA en 2014 para su uso en adultos que no han podido adelgazar con un programa de pérdida de peso y que tienen un IMC de entre 35 y 45 y al menos una afección relacionada con la obesidad, como diabetes tipo 2.

Cirugía Bariátrica y Metabólica

La cirugía bariátrica / metabólica es el tratamiento más efectivo y duradero para la obesidad severa, lo que resulta en una pérdida de peso significativa y conduce a la mejora, prevención o resolución de muchas enfermedades relacionadas, incluyendo diabetes tipo 2, enfermedad cardíaca, hipertensión, apnea del sueño y ciertos tipos de cáncer (3) (4).

Indicaciones para la cirugía de obesidad y enfermedades relacionadas con el peso: declaraciones de posición de la Federación Internacional para la Cirugía de la Obesidad y los Trastornos Metabólicos (IFSO) y La Sociedad Americana de Cirugía Bariatrica y Metabólica:

• IMC ≥ 40, o más de 100 libras de sobrepeso.

• IMC ≥ 35 y al menos una o más comorbilidades relacionadas con la obesidad, como diabetes tipo II (DM2), hipertensión, apnea del sueño y otros trastornos respiratorios, enfermedad del hígado graso no alcohólico, osteoartritis, anormalidades lipídicas, trastornos gastrointestinales o enfermedad del corazón.

• El tratamiento quirúrgico de pérdida de peso mejora los componentes del síndrome metabólico. Esto se aplica a pacientes con obesidad de clase I (IMC> 30 kg / m2), así como a pacientes con obesidad de clases superiores.

• Obesidad de larga data (> 5 años)

• Falla comprobada de la terapia nutricional y conductual. Incapacidad para lograr una pérdida de peso saludable sostenida por un período de tiempo con esfuerzos previos de pérdida de peso.

• La cirugía para la obesidad y las enfermedades relacionadas con el peso es efectiva en pacientes con obesidad menor de 18 años.

• La cirugía para la obesidad y las enfermedades relacionadas con el peso es efectiva en pacientes con obesidad mayor de 60 años. La mayoría de los estudios concluyen que el objetivo primordial de la cirugía para la obesidad y las enfermedades relacionadas con el peso en pacientes mayores de 60 años es mejorar la calidad de vida.

• En 2007, las directrices interdisciplinarias europeas, de acuerdo con las opiniones expresadas por un documento de pediatras estadounidenses, respaldaron el uso de cirugía para pacientes con obesidad menores de 18 años, cirugía de apoyo para obesidad y enfermedades relacionadas con el peso solo para pacientes cuyo IMC> 40 kg / m 2 (o> 99.5º percentil para la edad) con al menos una comorbilidad.

• Los trastornos del estado de ánimo y la ansiedad no se consideran contraindicaciones para la cirugía. Los síntomas del estado de ánimo y la ansiedad deben controlarse cuidadosamente tanto antes como después de la cirugía. De ahí la importancia de tener un equipo multidisciplinario involucrado en el tratamiento del paciente.

Los beneficios de las cirugías dependen de las técnicas que se realicen pero en general, éxito en el descenso de peso es entre el 68 al 85% (diferencia significativo si se lo compara con el tratamiento no quirúrgico), resolución o mejoría de la diabetes en el 85%, en hipertensión en 70%, dislipemia 85%, hígado graso 90%, apnea del sueño 95%. Esto aumenta la expectativa de vida en 8 años en el varón y 12 años en la mujer.

Al observarse los beneficios metabólicos que la cirugía generaba, el 2003 en Roma, se realizó un consenso que reunió a diabetólogos, cardiólogos, médicos clínicos y cirujanos donde se propuso las cirugías bariátrica para tratar estas enfermedades metabólicas sin tener que ser un obeso mórbido, surgiendo así la denominación de cirugía metabólica.

Los estudios demuestran que la cirugía bariátrica puede reducir el riesgo de muerte prematura de un paciente en un 30-50% (5) (6).
Los pacientes generalmente pierden más peso uno o dos años después de la cirugía bariátrica y mantienen una pérdida de peso sustancial con mejoras en las afecciones relacionadas con la obesidad (7) (8).
Los pacientes pueden perder hasta el 60% del exceso de peso seis meses después de la cirugía, y el 77% del exceso de peso tan pronto como 12 meses después de la cirugía (9).
La mayoría de los pacientes de cirugía bariátrica con diabetes, hiperlipidemia, hipertensión y apnea obstructiva del sueño experimentan resolución o mejora completa (JAMA, 2004) (10)

CondiciónEnfermedad resuelta o mejoradaResuelta
Diabetes tipo 286%76.8%
Hipertensión78.5%61.7%
Apnea obstructiva del sueño85.7%83.6%
Hiperlipidemia78.5%61.7%

Lograr un IMC de menos de 30 se asoció con tasas significativamente más altas de interrupción de la medicación para la hiperlipidemia (60.7% vs. 43.2%), diabetes (insulina: 67.7% vs. 50.0%; agentes orales: 78.5% vs. 64.3%), e hipertensión (54.7% vs. 34.6%)

El riesgo de muerte asociado con la cirugía bariátrica es de aproximadamente 0.1% (11) y la probabilidad general de complicaciones mayores es de aproximadamente 4% (12)

• Los estudios demuestran que la cirugía bariátrica reduce el riesgo de muerte prematura de un paciente en un 30% o más (13).

• La cirugía bariátrica se asocia con una mejora significativa en la supervivencia a largo plazo de más de ocho años en casi 8,000 pacientes; la tasa de mortalidad fue de 1.5% versus 2.1% para la población general (Endoscopia quirúrgica, 2015) (14).Extendido de ocho a 14 años, la mortalidad de los pacientes de cirugía fue del 2.5% en comparación con una tasa de mortalidad para la población general del 3.1%

• La cirugía bariátrica ayuda a mejorar o resolver más de 40 enfermedades y afecciones relacionadas con la obesidad, incluyendo diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas, ciertos tipos de cáncer, apnea del sueño, presión arterial alta, colesterol alto, apnea del sueño y problemas en las articulaciones (15)(16).

• 60% de reducción en la mortalidad por cáncer, con las mayores reducciones en los cánceres de mama y colon (17). 56% de reducción en la mortalidad por enfermedad coronaria, 92% de reducción en la mortalidad por diabetes tipo 2

• Entre casi 16,000 pacientes con obesidad severa, la mortalidad por todas las causas disminuyó en un 40% por hasta siete años después del bypass gástrico en comparación con aquellos que no se sometieron a cirugía (NEJM, 2007) (18).

• Las muertes por cualquier enfermedad relacionada con la obesidad disminuyeron en un 52% y fueron significativamente más bajas para la diabetes (92%), la enfermedad de las arterias coronarias (59%) y el cáncer (60%)

• Los resultados de 2.010 pacientes en el estudio de sujetos obesos suecos (SOS) muestran que la cirugía bariátrica se asoció con una reducción de casi 30% a largo plazo en la mortalidad general durante un período de 20 años en comparación con la atención habitual (Journal of Internal Medicine, 2012) (19).